09 junio 2010

Comunicación y salud 2.0

Mañana todos los interesados en los temas de Salud y la comunicación 2.0 estamos citados en Valencia en el II Workshop Tecnologías para la salud; Salud 2.0 Es la hora de las sinergias (http://goo.gl/xa5m). Y es que, aunque no lo parezca, el hecho de que se empiecen a tratar estos temas en un taller/conferencia/charla como esta, es más que importante.
Las instituciones sanitarias estamos ya habituadas a trabajar con páginas web exclusicamente 1.0, es decir, comunicación de salida pero con nulo feedback. No es porque no se establezcan los canales habituales (principalmente correo electrónico o buzón de sugerencias), sino porque los contenidos no suelen dar pie a ello.
Sin embargo, comienza a haber un caldo de cultivo que considero interesante para que despunte una interacción entre profesionales sanitarios/instituciones y los usuarios/pacientes. Quizás lo veo porque estoy un poco en este mundo y porque intento buscar nuevas alternativas que comuniquen mejor, o porque el público con el que intento trabajar es joven y tecnológico.
En el Departamento en el que te trabajo ya se han puesto en marcha algunos proyectos que intentan hacer contenidos colaborativos pero, obviamente, están comenzando y se destinan exclusivamente a los profesionales sanitarios. Esto es, sin duda, un gran avance y para mi fue una alegría saber lo que se cocía.
Pese a ello, no estoy contento del todo. Está claro el principio que pretenden los creadores del proyecto, pero no lo tienen claro los que se quieren adherir a él. Se sigue teniendo en mente la web clásica y ¡no tiene nada que ver!
Así que vamos a tener que pasar a la acción: primero con los directivos y luego con el personal implicado.
Pero no me gustaría que la cosa quedara simplemente ahí. Ahora queda dilucidar como implicar a los ciudadanos, a los usuarios de la sanidad, en mi caso pública, en ella. Y aquí viene el problema. Principalmente de concepto por parte de la Administración. ¿Hasta qué punto se permite el acceso del ciudadano? ¿Sólo opinión? ¿Le añadimos también la participación en alguna toma de decisión? ¿Dónde ponemos el límite?
El taller al que asistiré mañana espero que me aporte alguna idea con la que afrontar lo que nos viene o, mejor dicho, lo que me gustaría que viniera.

PD. Es que luchar contracorriente es tan cansado que a veces te sientes sólo, cuando seguro que no lo estamos.